Todo empezó cuando mis papás de Taiwán se enamoraron, y sus familias se opusieron a su matrimonio (como en Romeo y Julieta, sí sí.) Decidieron mudarse a Buenos Aires Argentina. Se casaron, y así nací yo. 

A los 4 años me enviaron a un colegio chino pero no se imaginaron que se iban a encontrar con la peor pesadilla de sus vidas: Yo odiaba al idioma chino y me aseguré de expresarlo de formas MUY dramáticas. Por ejemplo: Descuarticé muchos diccionarios chinos y libros chinos. Lloraba, gritaba y pateaba cada vez que me metían en el auto para llevarme al colegio. Cada vez que mi mamá quería que haga la tarea, yo salía corriendo, y ella me perseguía con una escoba (Te dije que todo era muy dramático... )  

Bueno. Ya lo ves.  

El idioma chino me parecía MUY difícil.

No encontraba la forma de aprenderlo ni soportarlo. 

Un día, antes de empezar mi quinto grado de la escuela, le dije a mis papás que no quería ir a la escuela china, porque la maestra de 5to grado gritaba mucho y me aturdía los oídos. 

Tal como habrás imaginado, me mandaron al colegio igual. 

La maestra era muy gritona y aturdía mis oídos, PERO! 
Contaba historias de una forma increíble, y me ayudó a descubrir las cosas más interesantes del idioma chino. 

Y así me enamoré del idioma chino. 

Me gustó tanto que empecé a enseñarlo cuando tenía 18 años en distintos lugares (universidades, institutos, empresas, etc.)

Era un buen ingreso para una pobre estudiante de medicina. (Realmente era muy pobre. En mi casa, cuando llovía afuera, llovía adentro también 😂 )

Además, me divertía bastante: Me reía con los alumnos, o de los alumnos (Oops. Eso último no sonó muy profesional jaja) 

Luego de graduarme de la secundaria de la escuela, me metí a estudiar medicina en la universidad de Buenos Aires, y al graduarme trabajé como residente de pediatría.

Mientras trabajaba como residente de pediatría, también estaba cuidando a mi mamá que sufría por su cáncer terminal. 

Los horarios del hospital eran muy demandantes y siempre llegaba a casa muy cansada, tan cansada que lo único que hacía era dormir. Pero la realidad es que lo que más quería, era pasar más tiempo con mi mamá. Sabía que su tiempo era limitado... 

Así que renuncié a mi trabajo en el hospital, y al mes siguiente empecé a trabajar como traductora trilingue en un banco chino con sedes en Argentina. 

Después de batallar contra el cáncer durante 4 años, mi mamá falleció y de repente sentí un vacío enorme.

Me di cuenta de que tenía que procesar el duelo, así que me fui a estudiar a EEUU. 

Y así fue cómo renuncié a mi trabajo en el banco y llegué a California. Estaba en una nueva ciudad con 0 contactos y muy poca plata (tenía dinero para sobrevivir 2 meses ).

Un día en mi habitación (que en realidad no era una habitación, sino el garage de una casa 😂 ), empecé a soñar y construir este emprendimiento de Chinchin Chino - mi escuela online de chino mandarín.

No fue un proceso fácil: Nadie me conocía, nadie quería ser mi alumno, y el proyecto casi se muere. Pero gracias a Dios, la plataforma sobrevivió y sigue creciendo. Actualmente tiene más de 15 mil suscriptores y centenares de alumnos alrededor de todo mundo hispano, desde muchachos que están estudiando en la secundaria, hasta ingenieros de facebook, google y empresarios que viajan a China para hacer negocios... Todos pasaron por aquí.   

Mientras seguía con mis estudios en California, un día conocí a un ex convicto que se escapó de una prisión de China. Era un pastor cristiano que fue encarcelado simplemente porque cree en Jesús (Si quieres leer su historia googlea ¨hombre celestial¨. Tuve el privilegio de ser su intérprete chino español y chino inglés en sus conferencias internacionales ,y así fue cómo terminé viajando a Miami, Argentina, Perú y Colombia, para hablarle a más de 50,000 personas on stage. (Todo esta explicación simplemente para mostrarte que mi chino es muy bueno y profesional y que cuando hablo la gente me entiende jaja)

Tal como habrás notado, mi vida fue girando en distintas direcciones que nunca me imaginé: Desde el campo hasta California, desde médica hasta el banco hasta un emprendimiento online... La vida realmente está llena de sorpresas como una cajita de chocolates. 

En cada crisis, cada cambio, pude encontrar nuevas oportunidades... Gracias al idioma chino. 

Todos dicen que es el chino mandarín es el idioma del futuro. Yo digo que es el idioma que cambió mi pasado, mejoró mi presente (porque me dio más flexibilidad de horarios y también triplicó mis ingresos previos como médica o traductora), y sí, también es el idioma del futuro (se lo voy a enseñar a mi hijo, pero sin perseguirlo con escobas 😂  )

✏️ Nací y crecí en un campo de un pequeño lugar llamado Mercedes, Buenos Aires. Mercedes el paraíso de los salames, así que si me preguntas cuál es mi comida favorita, diría que es el salame (y también dumplings chinos, y también el chocolate, y también el pato pekinés, y también... Perdón, me emociono demasiado cuando hablo de comida)

✏️ Después de trabajar como residente de pediatría y traductora en el departamento de IT en un banco, descubrí que lo que más me gusta es enseñar cosas, ser mi propia jefa, y estar en pijamas todo el día. Así que ahora manejo toda esta plataforma educativa de Chinchin Chino desde casa, en pijamas.

✏️ Odio limpiar la casa. Para hacerlo más llevadero canto a todo pulmón canciones de Disney (Ayer limpié la casa y canté la canción ¨un mundo ideal¨ de Aladín, y me emocioné tanto que derramé 4 lagrimones). 

✏️ Escribí algunas canciones raras sobre algunos virus y bacterias, y terminaron viralizandose. Puedes googlear ¨yo soy un estafilococo¨, y ¨oda a la urea¨. 

✏️ Lo más importante para mí son mi familia y mis amigos. Quería y sigo queriendo pasar más tiempo con las personas que más amo, y esa es la razón por la que elegí esta vocación: Me puedo conectar con personas de todo el mundo, y a la vez disfrutar de mis seres queridos: Mi esposo (al que conocí por Tinder jaja), mi bebé, mi papá y mis amigos. Después de todo, la vida es corta y uno tiene que hacer lo que disfruta, verdad?